El autor humano escribe con su estilo, pero bajo la inspiración divina, de modo que lo escrito verdaderamente es palabra de Todopoderoso.Favorece a Sión en tu inmensa voluntad y bondad: reedifica las grandes y fuertes murallas de Jerusalén;Los Salmos 91 y 92 son dos poderosos cantos que nos invitan a entregarse en manos en Altísimo y a alabar s